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TURISMO INSTÁNTANEO
El Partenón ha comenzado a... No, no es que ya no esté, el bulto blanco sigue en la cima, presidiendo Atenas. La cuestión es que hay días en que varias de sus columnas NO están. Al día siguiente, sin embargo, reaparecen. Notre Dame de París ha echado de menos unas gárgolas. No son robos, no hay daño, son amputaciones fortuitas. Se convierte en el hype informativo. ¿están conectados estos hechos? ¿A qué responden? ¿Se puede establecer un patrón? Los frescos de Giotto se han mostrado invisibles está mañana.
Consecuencia directa: la disolución de los monumentos colpasa y parece anunciar el fin del turismo tal y como lo conocemos. En un estertor, una última mutación del sector creará los Viajes Instantáneos: has de estar dispuesto a viajar en cualquier momento, la disponibilidad vital se flexibiliza, los préstamos y los empeños se duplican: hay que poder trasladarse en cuanto te avisen de la lista de espera.
Avistar la Torre Eiffel (¿quién sabe si por última vez?) se convierte en el nuevo viaje a La Luna.
En una de las zonas más apartadas del Amazonas ha aparecido hoy una incomprensible puerta de bronce con inscripciones latinas. Los jefes de la tribu la han examinado. Después de un largo y costoso consejo, se decide fundirla y almacenarla convenientemente en la reserva de calor de la comunidad. A la mañana siguiente, dos recipientes rudimentarios y resistentes llenos de un líquido noble aparecerán en el vano donde hasta ayer estuvo la Puerta Santa del Vaticano.
Silvia Nanclares